Padre Ignacio Larrañaga Orbegozo OFM Cap
Ignacio Larrañaga, sacerdote capuchino, escritor y evangelizador, considerado por muchos un “profeta moderno” o un “místico del siglo XXI” es el fundador de Talleres de Oración y Vida (TOV). Su principal obra ha consistido en dejar al mundo miles de laicos preparados y dedicados a enseñar la oración profunda y personal que permite un encuentro cotidiano con el Señor en el día a día.
Nació en España, el 4 de mayo de 1928, en la ciudad de Azpeitia, en el Barrio Baristain, caserío Txanton. Sus padres fueron: Marcelino Larrañaga Larrañaga y María Salomé Orbegozo, siendo el cuarto hijo de una numerosa familia.
A la edad de 12 años, en 1940, ingresa al Seminario de los Capuchinos de Alsasua. Recibe el Subdiaconado el 29 de marzo de 1952 en Pamplona y, poco después, en esa misma ciudad, recibe la Ordenación el 20 de diciembre de 1952.
Desde pequeño tuvo inclinación por la música, desde el Seminario tocaba el piano y el órgano. Desarrolló una gran sensibilidad por la música, es así como todos sus audios y videos los adornó siempre con trozos de los grandes maestros de la música barroca.
Noche de Gallipienzo
En el mes de junio de 1957, estando en el pequeño pueblo de Gallipienzo, Navarra, en una tibia noche de verano, contemplando las estrellas, fué bendecido con una experiencia, que él describe, en su libro la Rosa y el Fuego, como un deslumbramiento, una inundación de ternura: El AMOR que asalta, invade, compenetra, embriaga y enloquece.
Esta experiencia se le conoce como gratitud infusa extraordinaria. Estos instantes y los infinitos matices que aquella fulgurante vivencia contenía quedaron grabados en su alma para siempre y él mismo afirma en La Rosa y el Fuego que “las líneas gruesas y vitales de su obra tan compleja, los libros, Encuentros y Talleres de Oración y Vida emanaron de la experiencia de aquella noche venturosa.
Radicado en Chile desde 1959, desplegó un apostolado variado y fecundo. Emprendió una serie de semanas de convivencia franciscana a lo largo de la angosta y larga geografía chilena. Como resultado de esta prolongada evangelización fue suscitándose con el paso de los años, un gran entusiasmo entre los integrantes de toda la familia franciscana, que no se redujo solo a emociones o palabras, sino que fue concretizándose en proyectos.
En 1965 fundó el Centro de estudios franciscanos y pastorales (CEFEPAL), dedicándose por unos diez años a la animación franciscana postconciliar en varios países de Latinoamérica.
El año 1974 en Brasil, dio inicio a los retiros semanales llamados «Encuentros de Experiencia de Dios», (EED) que condujo incansablemente hasta 2011 por más de 40 países de cuatro continentes, con la asistencia de millares de personas.
Además de los EED, desplegó una gran actividad evangelizadora a grandes masas en teatros, gimnasios, estadios, con charlas sobre materias cristológicas, matrimoniales, dimensión humanizante de la oración, etc.
También inicia su etapa de escritor en 1974, tardíamente, a la edad de 45 años. Escribió 16 libros, la mayoría de los cuales han alcanzado numerosas ediciones, y han sido traducidos a más de 10 idiomas. Lo mismo que manuales y otros escritos especialmente para el uso de los Guías de Talleres de Oración y Vida (TOV). En la actualidad está considerado como uno de los autores católicos de mayor difusión.
Los Talleres de Oración y Vida (TOV), que fundó en el año 1984, son un servicio eclesial aprobado por la Santa Sede desde 1997, y constituyen la cumbre y coronamiento de toda su actividad apostólica por su fuerza expansiva, por sus frutos y por el alto aprecio hacia los mismos, manifestado por la Santa Sede y los Obispos. Han pasado por sus sesiones formativas millones de personas. El lema que sintetiza el camino a recorrer en Talleres de Oración y Vida es: «Del encanto de Dios, al encanto de la vida».
Entregó a los Guías de TOV su testamento espiritual en los encuentros semanales que llamó Semanas de Culminación, iniciados el año 2012, para lo cual viajó a numerosos países a fin de recoger el sentir del pueblo de Guías, concluyendo ese proceso de oración y reflexión comunitaria en la Re Fundación de los TOV en el año 2013.
Su fallecimiento, en Guadalajara México el día 28 de octubre de es año, lo encontró en plena misión y a solo dos semanas de completar el programa de 62 Semanas de Culminación, las cuales se pudo concluir íntegramente gracias a la filmación que dejó preparada en prevención de que algo le ocurriera.